viernes, 31 de agosto de 2007
Carta a una ex-compañera.
Querida Rosa:
Desde el respeto y la tolerancia que deben liderar siempre como bandera los socialistas te envio estas lineas incapaz de guardarlas solo para mi.
Son muchos los compañeros que te han criticado duramente por tu actitud de rebeldia, otros sin embargo te alaban y te consideran valiente.
No te conozco lo suficiente para emitir un juicio, no me siento autorizada para ello, es solo mi humilde opinión.
Es hermosa la democracia porque nos permite expresar nuestras ideas y luchar por ellas, todos tenemos ese derecho.
Pero a veces los caminos y las formas que tomamos para hacerlo son erroneos y a la larga, terminan en un desenlace desafortunado y dejan reducido a un triste y amargo recuerdo tú imagén después de tantos años.
Yo , que soy tan amante del cine, definiria la situación con el título "Durmiendo con su enemigo" y sabrás bien porque: por tus continuas declaraciones en una innombrable cadena de radio que solo se ha dedicado a hundir al que desde hoy es tu ex-partido, a tus guiños a personajes tan ajenos al socialismo como Francisco José Alcaraz, en fin, tantas y tantas muestras de hostilidad y porque no decirlo de provocación.
Me da pena, porque quizá creyendo que eres libre, no sabes que te han utilizado, te han convertido en una pieza mas para la polémica contra el Gobierno, un ariete que golpea ciego y con ira al Ejecutivo con la única intención de verle caer.
Espero que tu andadura sea buena para los ciudadanos que te voten en tu nuevo partido, es innegable tu trayectoria y tu buen hacer en los diferentes cargos que ocupaste..pero por favor, no vuelvas a vender esa bonita imagen de seguidora de Pablo Iglesias.
De seguro, mas de una vez, se habrá revuelto en su tumba oyendo tus declaraciones contra tus propios compañeros, sin crítica constructiva y rozando la deslealtad.
Buena suerte en este que será tu nuevo(y ¿definitivo?) partido.
Agur.
Extracto publicado en el diario El Correo (4-09-2007).
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