domingo, 16 de enero de 2011

La luna de Velázquez


Pocos placeres son comparable con pasar la tarde de sábado en el Museo del Prado.

Me despide Velázquez que charla con la luna, después de encontrarme por los pasillos a dos amantes que paseaban desnudos bajo los focos y la mirada asombrada de los visitantes.



Y al Paseo del Prado bañado por las luces de Enero.