Se podría decir que se acabó la fiesta, metáfora que definiría el cierre de la comisión del caso Guateque.
Con solo dos reuniones y sin comparecencias, se da por cerrada dicha comisión y justificando su carpetazo con la incapacidad para llegar a un acuerdo.
Así pues, cada grupo presentará su dictamen y será aprobado el del PP, que tiene la mayoría.
Las dos reuniones que mantuvieron los siete miembros que forman esta comisión (cuatro populares, dos socialistas y uno de IU) sólo pusieron de manifiesto los desencuentros sobre los nombres y el número de los comparecientes y los reproches mutuos que impidieron alcanzar cualquier tipo de acuerdo.
La reunión de ayer, duró solo 20 minutos. En ella los tres grupos fueron incapaces de ponerse de acuerdo en cuanto al número de comparecientes y las diferencias eran notables. Los socialistas proponían 200 comparecientes, IU quería 130, incluidos representantes sindicales, vecinales y cargos políticos en el Ayuntamiento, mientras que el PP pedía centrarse en los aproximadamente 30 imputados de la trama.
El cierre definitivo será el 28 de marzo en una nueva sesión, donde cada grupo presentará su propio dictamen.
El portavoz socialista en el ayuntamiento madrileño, David Lucas, ha definido todo el suceso como un "lamentable espectáculo".
Una imagen lamentable para los ciudadanos de la que culpa al PP al que acusó de ejercer "su rodillo" para aplastar las iniciativas de la oposición."Se puede constatar tras las juntas de portavoces que el PP no ha querido nunca celebrar la comisión de investigación", sentenció Lucas.
Por lo tanto, nos quedamos sin imputados, sin culpables y sin castigos.
